Notas
rapidas sobre la Sola Scriptura
Por Russell Thibodeaux
“Toda la
Escritura es inspirada por Dios, y útil para enseñar, para redargüir, para
corregir, para instruir en justicia, a fin de que el hombre de
Dios sea perfecto, enteramente preparado para toda buena obra” (2 Timoteo 3:16-17 Reina Valera
1960)
Esta será el octavo y final artículo
en esta serie particular sobre la Sola Scriptura (“Solo la Biblia”). Hoy
hablaremos específicamente sobre un argumento que es comúnmente usado por católicos
(y también por otros). Muchos enemigos de la Sola Scriptura consideran a este
argumento como el super, knockeado-de-un-golpe, y el-gran-padre-de-todos-los-argumentos
en contra de la enseñanza de la Sola Scriptura. Este es el argumento del canon
(i.e. la lista de los libros contenidos en las Escrituras).
Y va algo así:
Argumento #8 ¿Como alguien puede creer en la suficiencia de la Sola
Scritura cuando la Biblia nunca siquiera revela su propio canon? Necesitamos
saber lo que el canon es con absoluta certeza, y ya que no esta en la Biblia,
necesitamos otra fuente infalible para que nos lo diga.
Otra vez, recordemos la
definición de la Sola Scriptura… que la Biblia es la única regla infalible de fe
para la Iglesia hoy. Y es por eso, que es nuestro máximo estándar moral. Pero
esto no quiere decir que la Biblia tiene que ser una fuente exhaustiva de cada
dato espiritual que hay alguna vez existido.
Es verdad que la Biblia no
contiene una lista específica de todos sus libros. Dios ciertamente escogió no
colocar tal lista dentro de sus páginas, pero esto no convierte a la Biblia
como insuficiente regla de fe (como es
evidente en 2 Timoteo 3:16-17).
Pero para comenzar, la premisa
del “argumento del canon” es incorrecta. Todo este argumento está ASUMIENDO la
necesidad de una “certeza infalible”. De eso en realidad se trata ese argumento, y esta “necesidad” es una suposición
bastante extendida en la Iglesia Católica Romana. Pero este artículo no es
sobre QUIEN definió el canon… sino que trata de COMO nosotros conseguimos el canon…
ni siquiera es sobre CUAL es el verdadero canon. Es simplemente para demostrar que:
1) el canon NO NECESITA ser enlistado en al Biblia y 2) los católicos realmente
no tienen la certeza que ellos afirman tener.
Los católicos a menudo se
jactan de su certeza infalible, pero si la certeza infalible sobre el canon es
tan importante para la Iglesia Católica, entonces ¿Porque el canon no fue “infaliblemente”
definido hasta el Concilio de Trento en 1546? Parece que la Iglesia Católica
habla mucho, pero ha hecho un trabajo muy pobre en proveer a sus miembros con
alguna certeza real, mucho menos con
la certeza que ella tan orgullosamente afirma. Por los 1500 primeros años de la
Iglesia, la Tradición Católica fallo en proveer certeza infalible en el asunto
del canon. No solo eso, sino que el presente canon tiene algunos temas problemáticos
(ver los links abajo). Así qué, este argumento sobre la “certeza-infalible-sobre-el-canon”
suena bien, pero es un engaño.
También vea estos artículos:
Así que tenemos razones para
cuestionar la afirmación católica sobre la certeza sobre el canon. Pero también
tenemos razones para cuestionar su afirmación de haber interpretado infaliblemente ciertos versículos de la Biblia.
Hay as de 31000 versículos en la Biblia, y solo un pequeñísimo porcentaje de
estos versos han sido “infaliblemente“ interpretados por la Iglesia Católica. Los apologistas católicos
están en desacuerdo sobre el real número de estos versos (algunos dicen 8, algunos dicen 11, algunos dicen
20, etc.), pero aun si hubieran 100 versos que la Iglesia hubiera oficialmente e
“infaliblemente” interpretado a través de los siglos, eso aun solo sería
¡Alrededor del 0,003% de la Biblia infaliblemente interpretada!
Para captar la idea de este
porcentaje, eso equivaldría a solo 16 pies de toda una milla completa, o solo
26 horas de todo un año entero. Si tuviéramos una empresa de 2000 empleados,
esto sería como que solo 6 de ellos vengan a trabajar. De nuevo, estos ejemplos
representan un porcentaje extremadamente pequeño de versículos de la Biblia que
llevan la garantía de la Iglesia en que han sido correctamente interpretados. Esto
es bastante débil para un grupo que bastante a menudo se mofa de los protestantes
por su “falta de certeza”.
¿Solamente 100 versículos en
2000 años? Si este es el indicador de la tasa de progreso para la “certeza
infalible”, en la Iglesia Católica, entonces, anímense queridos católicos, -- ¡solo
les queda medio millón de años o (620000 para ser exactos) para logar completar
la certeza infalible de toda la Biblia! Esto difícilmente resultara confortante
para los católicos. Si la Iglesia Católica es todo lo que ella reclama ser, y
esta realmente preocupada en dar a su
gente “certeza infalible“ sin duda pudo haber hecho algo mejor que esto en 2000
años.
En primer lugar si la Iglesia
Católica siente la necesidad de interpretar infaliblemente las Escrituras,
entonces ¿Porque tan pocos versículos? ¿Por qué no toda la Biblia, o por lo
menos la mayoría de ella? ¿Y no es interesante como ciertos conceptos únicamente
católicos (sin embargo anti bíblicos) se han hecho espacio en este lista de enseñanzas
“infalibles” (e.g., La Inmaculada Concepción, y la Asunción de María, etc.)
¿Soy solo yo, o esto le parece sospechoso a alguien más? ¿Están perfectamente satisfechos
con solo algunos versículos interpretados de esta manera, siempre y cuando sus
doctrinas favoritas pueden lograr el “status de infalibles”?
Los apologistas católicos
pueden objetar y decir que nunca fue la intención de la Iglesia interpretar infaliblemente
TODA la Biblia y que ellos solo hacen esto cuando las disputas se levantan. Pero
muchas, muchas disputas se han levantado a través de los siglos que nunca terminaron en la categoría de “infaliblemente declarado”,
así que esta no es una opción válida.
Irónicamente, hay mucha confusión
y desacuerdo sobre esto, aun entre líderes
católicos y apologistas. Los católicos admitirán que este tema es complejo
y de diferentes estratos, y nadie parece ser capaz de decir exactamente cuales afirmaciones
son consideradas apropiadamente “infalibles”. Este hecho simplemente enfatiza a
todos, aun mas, que la gran “certeza” que la Iglesia Católica se jacta es
puramente fantasía.
Otro problema con el argumento
del canon es que muchos (sino la mayoría) de los católicos hoy parece creer en
la posición de la “suficiencia material”. Esta posición afirma que la Biblia
tiene todo lo necesario “materialmente” en ella. Si eso es verdad, entonces en canon
(que no está en ella) no NECESITA estar en la Biblia. Así que si esta posición
de la “suficiencia material” es correcta, el argumento del canon contra la Sola
Scriptura no puede ser verdad. Nadie puede creer en el argumento del canon y en la posición de la “suficiencia
material“ al mismo tiempo.
Una objeción en contra del argumento
del canon es que si una regla de fe (la Biblia) debe tener una lista de
contenidos (el canon) entonces ¿Qué acerca de la particular regla fe de la Iglesia
Católica? ¿Dónde está el “canon” de la Tradición Católica? No existe. Así que,
si el concepto de Sola Scriptura falla porque no tiene una lista de sus propios
libros infalibles, entonces la Tradición también falla ya que
tampoco enlista sus propios contenidos. Ellos aplican la regla para unos
y para otros no.
En conclusión, este “padre de
todos los argumentos” está basado en la falsa premisa que nosotros DEBEMOS
tener “certeza infalible” sobre el canon. Pero el hecho es, solo Dios puede
tener este tipo de certeza. Nosotros, no. Sin embargo, por Su gracia, nosotros
los seres humanos tenemos razonable y suficiente
certeza en los libros inspirados por Dios. Él nos da la libertad de
investigar otras fuentes (e.g la historia de la Iglesia, los padres, etc.),
usar discernimiento, evaluar la evidencia disponible, y usar nuestras mentes falibles
para llegar a una conclusión razonable.
Así que, el hecho de que el canon
no está específicamente enlistado dentro de las páginas de la Escritura no
afecta nada a la suficiencia de la Biblia como nuestra Máxima Regla de Fe.
Tradución: Marcos Zuñiga.
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